Birmania es tan desconocida como su nombre, ya que en realidad habría que llamarla Myanmar, como oficialmente corresponde.

Pocos lugares mantienen una identidad tan misteriosa y sugerente como éste. Miles de pagodas cubiertas de pan de oro, frondosos bosques de teca, caudalosos ríos que emanan actividad, imágenes de Buda por todas partes, una notable diversidad étnica, sus habitantes de vestimentas tradicionales y gran hospitalidad. El territorio está salpicado de pequeños poblados con una intensa vida en sus mercados. Su economía de subsistencia, arrozales interminablemente aferrados a la llanura y a la montaña en sinuosas terrazas, sistemas de pesca artesanales; incluso han ideado una original método de cultivo flotante. Pero ante todos los ojos, los apacibles birmanos sufren un gobierno autoritario que no se merecen, como tantos pueblos.

A pesar de todo, Birmania está ahí, sus templos, sus paisajes, sus costumbres y sobre todo sus gentes.

Cándido Barco es fotógrafo en sus ratos libres. Fascinado por la fotografía en general, se deja seducir principalmente por el reportaje social. Dada su afición por los viajes, a menudo combina estas dos pasiones con el resultado reflejado, por ejemplo, en la presente exposición. Desde su primer contacto con el mundo de la imagen, hace más de 20 años, de la mano del Grupo Fotográfico BIHOTZ GAZTEA de Santurtzi, siempre ha estado ligado al mismo. Aquí es donde aprendió, aprende y donde enseña Fotografía. El Grupo dispone de una página web en la que podéis ver fotos de Candi y de otros componentes del mismo.

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